AVIDA
De Gustave de Kervern y Benoit Delepine
De Gustave de Kervern y Benoit Delepine
No
vamos a decir que la película carece de personajes con problemitas. Tenemos un
mudo tonto, una gorda suicida, adictos a anestesia para elefantes, taxidermistas,
un enano torero de rinocerontes y varios muchachos que no carburan bien. Lo que
sí vamos a decir es que los problemitas heavy no son de ellos, sino de quienes
los crearon. Una dupla de directores franceses con problemitas que me
encantaría tener: de ésos que empujan los límites del delirio.
Avida es una película tan normal como el hijo resultante de la
mezcla de espermas de Marilyn Manson, Ricardo Fort y Federico Klemm insertados
en el útero de Marta Minujín.
Para dar un ejemplo. De la trama se deduce el secuestro de un perrito en un
zoológico un tanto excéntrico. Pero eso no importa. Lo que queda es el
surrealismo mezcla de Tati y Buñuel más el humor negro de los autores (Aaltra, Mamuth) que plantean escenas independientes. Unidas, forman un
rompecabezas bizarro que cada uno intentará armar en su capocha. Uno las ve
detenidas primero: imagen en blanco y negro + sonido. Lentamente las escenas se
mueven, cobran vida, se decodifican hasta desnudarse. Abajo de todo eso siempre
hay sorpresa. Y la sorpresa es risa, es duda, es cine. Algo muy difícil de
encontrar.